sábado, 18 de octubre de 2008

XXVIII



Camarada! compañero! Con qué? Con el sudor de tus tacos!

... que los partidos patronales dejen de puertearnos y dilatarnos con nuestros derechos hermosensuales! dejen de volcarnos, hacernos el cuento del tío para levantarnos y después tirarnos a la basura como condones usados! viva la subversión hermosensual en las calles, en las veredas como los pichichos, en las plazas, y en las camas!

XII





¡Quita tus sucias garras, tus patas traseras y tu pulguiento hocico!...

VIII


Tu lujuriosa soberbia no sabe de castidades.

IX

ESPEJISMOS Y LABERINTOS HOMOSESUALES (SIC)
O UN CANTO A LA IMPOTENCIA HISTÓRICA DE LA PUTEDAD DOMINICAL

Obsecuentes petulancias,
estoicos graznidos,
inflamantes suspiros,
ardientes ponzoñas,
insultantes capelinas,
lánguidos vestidos
y abyectas opulencias.


Acicalados teoremas,
altivas palabras,
resonantes pasiones,
flácidos estupores
y mendicantes torpezas.


Pretenciosos aretes,
blondos collares,
austeros tocados,
intempestivos silencios,
insustanciales performatividades,
vegetantes carruajes
y pomposos desfiles.

Impetuosos desplantes,
pueriles sortilegios
descollantes pavoneos,
falaces atuendos,
exultantes pesquisas
y decadentes nimiedades.


Cortejantes miradas,
gráciles movimientos,
arrogantes vanidades
e impertinentes arrebatos.


Jugosas porciones de cuerpos,
iracundas obscenidades,
fétidas mansedumbres
y detestables flatulencias.


Indelebles manjares,
fingidos desvanecimientos,
portentosos juegos de sábanas,
soberbia platería
y regios ajuares de encaje.

Imberbes promesas,
airados consuelos,
incesantes pesetas y libras esterlinas,
incontables e inasequibles adornos,
virtuales verdades,
reales mentiras.


Tan sólo fagocitantes veleidades
de agónicas tertulias de alcoba.
(en otras palabras: tanta vuelta para darle al frito
o che Fani acomodáte la peluca, depiláte y apuremos el trámite)

¡Ay de mi señor cibernauta!
¡No me pretenda más!
Vuestra merced sólo sabe
de fassbinderescas poluciones nocturnas,
y licenciosos miriñaques,
entre espasmódicas y sosegadas lubricaciones.

Tú, mi señor,
de fecundas hidalguías
y febriles abanicos de raso,
que me atosigáis con prestancia,
hágase tu voluntad
sobre estas ubres votivas
por sobre todas las cosas.
Gloria al Dios muerto
por su séquito de ángeles musculados
que me bañan afanosos
entre díscolos e impasibles,
levantiscos sus dilatares
e insinuantes sus elegías.
Gloria a ti,
Reina entre vasallos,
de victoriosos zaguanes
y afables vestales,
que resucitas en tórridos estibadores de cuerpos
de subyugante e incandescente hombría.
Tal es el burocratismo stalinista
cual episteme de los yires ciberespaciales.

Mas no escatimaré
ensuciar mi pluma
en más verborragias insolentes
para haceros la pregunta indispuesta
¿por qué seremos tan platónicas?

Loka, y si te jode q te traten en femenino es tal vez probable q muy en el fondo sientas q ser mujer es degradante, que te degrada de tus privilegios socialmente imputados de masculinidad, que es vergonzoso que en este Mundo Feliz alguien de la casta alfa sea percibido como alguien de la casta epsilon, pensálo.